Horario:
Martes a sábados:
de 11 a 13 y de 18 a 21 h.
Domingos y festivos:
de 12 a 14 y de 18 a 21 h.
Lunes cerrado
En el arte los cambios se producen con mucha antelación a otros campos de la sociedad o la política. La capacidad del arte para asimilar las transformaciones y manifestar sus dislocaciones, las del ser humano y el contexto en el que vive, está engrasada desde el momento que un artista se erige en portavoz de sí mismo y posa su mirada y obra teniendo por centro un determinado conflicto. Quizás, la razón que hace del artista un ser expuesto y extremadamente sensible a las condiciones del entorno, sea la facilidad que tiene para moverse con desprecio por las dificultades cuando la soberanía de su fracaso no recae en nadie más que él mismo. Los cuatro artistas jóvenes invitados a esta muestra, Aitor Lajarín, Julio Sarramián, Nicolás Ortigosa y Janire Nájera, viven sumergidos de lleno en los conflictos que les plantea el mundo contemporáneo, viviendo los cambios en tiempo real y en los escenarios protagonistas de la transformación. Ninguno de ellos aceptaría hacerlo de forma virtual.
«Generando vista previa...» remite al mensaje que aparece en las pantallas de nuestros ordenadores cuando, seleccionado un fichero de imagen digital el ordenador debe de computarla a base de cálculo y crearla con los datos proporcionados, o con los que se almacenan en su memoria; hacerla visible. Para lo cual, el propio sistema nos ruega muy amablemente unos instantes de espera, sin duda para que seamos conscientes de que lo que le acabamos de exigir con un sencillo click, no es tan sencillo. En esos momentos la máquina está creando, y la creación, sobran explicaciones, es compleja y en muchas ocasiones improbable. El mensaje nos recuerda el tiempo implícito en las acciones, el tiempo que se necesita para la manufactura de cualquier objeto sea este un jarro de barro en un torno de alfarero, engranar las piezas de un reloj suizo, o una imagen generada digitalmente... Tiempo. Pero ese tiempo se dilata si hay que resolver operaciones que consumen una gran cantidad de recursos y la creación hace uso de todas las energías disponibles. La inocente sinonimia de espera transforma el quirófano digital en otra cosa, en un artesano, pienso. Siempre que aparece en pantalla el dichoso mensaje imagino que el ordenador se ha girado, nos ha dado la espalda, se ha puesto a trabajar de verdad, a crear; démosle tiempo, el que requiera. Y a los artistas, el suyo.
«Generando vista previa...» es el espacio interconectado que media entre la concepción de la imagen y su aparición. Es el nombre de esta exposición, y también la frase que podría adscribirse a los tiempos que vivimos. Remite, además, a un proceso de creación más profundo: ese que amasa variables zambulléndose en el conflicto para regresar del abismo triunfal y ofrecernos, como pieza cobrada en la caza, un corolario de su ambición y valentía. Hoy día el poder de las imágenes es tan absoluto que de alguna forma parece que estemos subyugados bajo el dominio de un estilo universalizado de hacer imagen, que hace muy difícil escapar de él, por su capacidad para aprender de inmediato lo nuevo y fusionarlo con lo existente creando una especie de imago aversabilis, a la que solo podemos alimentar a base de más y más imágenes, una insaciable bola de nieve que gira inspirada, aún.
En esta ocasión hemos centrado nuestra atención en la creación pictórica en La Rioja pasada esta primera década del siglo XXI. La razón hay que buscarla en la vitalidad de esta disciplina artística y su longeva resiliencia que le ha permitido adaptarse a los tiempos sin quebrase. Llevamos andado un largo camino en la fusión de las categorías visuales y la pintura sigue emancipándose sin atisbar su agotamiento.
Julio Hontana. Comisario de la Exposición