Daniel Verbis (León, 1968) muestra una selección de su obra reciente en la Sala Amós Salvador. La exposición, titulada Obsceanográfico, reúne 13 pinturas de gran formato, esculturas y dibujos, así como una gran pintura mural, pensada para el espacio riojano. La muestra estará abierta hasta el 19 de junio de 2016. Con motivo de la misma se edita una publicación, con textos del artista y de Miguel Fernández-Cid, así como documentación de la obra reunida y del proceso de realización del mural.

El hilo conductor del trabajo de Verbis es la investigación sobre los límites y el lenguaje de la pintura. Si en el arranque de los años 90 eran habituales sus intervenciones directas sobre los espacios, así como la recurrencia a materiales frágiles, tal vez como resultado de su interés por los debates propuestos por los artistas povera y minimal, el dibujo, el papel y el texto tomaron de inmediato un protagonismo central con importantes reconocimientos como su temprana exposición individual en el prestigioso The Drawing Center de Nueva York, en 1997.

Verbis mantiene desde entonces una intensa actividad teórica, siempre en torno a la idea de la pintura como lenguaje, a los juegos con el lenguaje y al proceso de aparición de la imagen. Como pruebas quedan proyectos como La farmacia del (autista), un conjunto de 640 dibujos ordenados en 8 cuadernos, alguno de los cuales se editó como libro (Vocablos, 1994); sus diálogos y textos sobre Luis Gordillo, que abrieron una vía de relectura de la obra del pintor sevillano; Geografía para ciegos (2010), una selección de poemas muy visuales; o “Pintura sin condición”, el texto con formato de diálogo que se recoge en el catálogo de su exposición en la Sala Amós Salvador.

Collage, mezcolanza, diálogo en la obra de Verbis

Para esta ocasión, ha reunido una selección de cuadros, dibujos y esculturas realizados entre 2009 y 2016, así como un mural, Boca oscura sin alma, pintado en el panel frontal de la sala. “Mi pintura es una pintura de collage, de mezcolanza, de diálogo: collages de técnicas, de comportamientos, de imágenes. Persigo cierta ambigüedad que deje abierta la obra para que el espectador la interprete”, señala Verbis mientras da los últimos toques al mural hecho en la sala logroñesa: “Cuando me planteo los murales parto de la elección de un color, en función del espacio y las obras seleccionadas. El resto lo define el propio proceso, ya que se trata de una pintura de acción”. Como si quisiera hacer una especie de síntesis final, recorre con la mirada las paredes de la sala, elogia el carácter abierto del espacio, y confiesa: “Uno siempre tiene ganas de ver las obras como están aquí, con esta distancia. Creo que se entiende mejor lo que uno plantea viendo cuadros abiertos, de carácter muy contemporáneo, junto a otros de factura más clásica. Mi pintura vive de ambas tendencias”.

En efecto, el carácter diáfano del espacio permite ver las distintas tentativas, como los dinámicos cuadros deconstruidos de 2009 y 2010 en los que la pintura quiere expandirse, la materia se independiza del soporte, el bastidor queda visible y se establece una tensión entre el carácter líquido de la pintura y su sentido más objetual. Junto a esos cuadros, dominados por la presencia de grandes ojos, una serie de polípticos en los que combina imágenes de estallidos con soluciones más bidimensionales, para llegar a los grandes formatos como El mercurio de la carne o el nacimiento del amor (2015) y …de este modo unas verdades esclarecen otras (2015-6), cuadros en los que todo se resuelve en la epidermis de la tela, con claras citas y juegos con la historia de la pintura.

Del conjunto queda la sensación de asistir al movimiento de pulsión de una materia que quiere salir del límite del cuadro y expandirse en el espacio, que se acerca a lo tridimensional pero sabe volver al plano tradicional de la pintura.

La exposición se completa con una serie de esculturas en las que priman el gesto manual y la referencia orgánica, las líneas frente al peso y lo pictórico a través del color y materiales como el tejido.

Trayectoria del artista

Daniel Verbis ha realizado exposiciones individuales en instituciones como The Drawing Center de Nueva York, el Centro de Arte Caja de Burgos o el MUSAC de León, y está presente en colecciones como Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Banco de España, MUSAC, Museo Patio Herreriano de Valladolid, CGAC de Santiago de Compostela o Artium de Vitoria. Ha obtenido importantes premios como el L’Oréal de Pintura en 1998 o la Beca Endesa en 2001. En 1992 se presentó a la III Bienal Cultural Rioja, en la que se adquirió su obra Trab y Glub.

Horarios

La exposición podrá visitarse desde el 28 de abril hasta el 19 de junio en los horarios habituales:

Laborables de 11 a 13 y 18 a 21 h., Festivos de 12 a 14 y 18 a 21 h. Los lunes la Sala permanecerá cerrada. Durante las Fiestas de San Bernabé el horario será como en festivo.